En esta época, muchos conductores aprovechan para realizar una revisión anual de su vehículo para mantenerlo en óptimas condiciones ante las mayores exigencias del verano (calor, más viajes…).
Así que, a partir de ahora, puedes sacarle el máximo partido a tus revisiones de verano, y en este artículo te damos algunas ideas para ayudarte a aumentar tus ingresos relacionados con estas operaciones…
INCREMENTA EL RENDIMIENTO DE LA REVISIÓN BÁSICA DEL VERANO
Sistema de refrigeración
Una de las intervenciones típicas en este punto es cambiar el refrigerante/anticongelante. Además, uno de los fallos típicos en esta ocasión es el sobrecalentamiento por fallo del sistema.
Por lo tanto, realizar un mantenimiento específico elimina el refrigerante viejo, lo reemplaza con refrigerante nuevo y agrega acondicionadores para que el refrigerante dure más, brinde una mejor protección y se mueva más fácilmente a través del motor.
Correa de distribución
Correa de distribución, correa del ventilador, correa auxiliar o correa del alternador… El motor está equipado con varios cinturones con funciones críticas, que pueden ser aún más exigentes en verano. La falla de cualquiera de estos podría causar complicaciones con el alternador, el ventilador o la bomba de agua, lo que haría que el motor se sobrecalentara y conectara a tierra el vehículo del cliente, lo que no suena muy bien si ha estado en nuestro taller de reparación recientemente.
Batería
Ni frío ni calor: A las baterías no les gustan las temperaturas extremas. Por lo tanto, no sorprende que la causa principal de la asistencia en carretera durante el verano sea la falla de la batería. Por lo tanto, el taller debe incluir la verificación de este componente en la base de revisión en esta época del año.
Además de verificar la carga (y reemplazar si es necesario), también buscaremos signos de corrosión en los terminales y las conexiones de los cables. Si no es necesario reemplazarlos, los terminales y el cableado se pueden limpiar y proteger con un producto adecuado.
Sistema A/C
En verano, el motor no es lo único que se sobrecalienta. Por ello, otra operación estrella es la de revisar el sistema de aire acondicionado. Las intervenciones deben incluir el reemplazo del filtro de la cabina (idealmente una vez al año). Al revisar este sistema, nos aseguramos de que los vehículos de nuestros clientes mantengan fresco el aire en su interior.
Para un funcionamiento completo, con servicios de climatización, eliminamos el moho del sistema, comprobamos fugas y desgastes, limpiamos el evaporador para restablecer el proceso de refrigeración y comprobamos la presión del sistema. Además del aceite, podemos añadir limpiadores biocidas, biocidas… para mejorar el rendimiento de los compresores de gas R-134a y gas R-1234yf.
Filtros de aire y aceite
Además del filtro de cabina, hay otros dos filtros cubiertos en las revisiones de verano: el filtro de aire y el filtro de aceite. El primero es evitar que la suciedad levantada mientras conduce entre en el motor, y si alguna vez hubo un momento en que los vehículos fueron más propensos al polvo y la arena, es el verano.
Asimismo, los cambios de aceite y filtros son otro «hit» del verano: es la forma más sencilla de refrescar el motor, por lo que muchos conductores lo hacen en esta época.
Frenos
Los frenos (junto con los neumáticos) son el otro elemento «estrella» en las revisiones de verano. Además de revisar pastillas y discos de freno, también es importante que el líquido de frenos esté en perfectas condiciones. Recuerda que por norma general el fabricante recomienda sustituir cada dos años o 40.000 km
Cada vez que un cliente visita nuestro taller, siempre es un buen momento para darle puntos extra. Por lo tanto, construir una relación de confianza es fundamental para mantener contentos a los clientes todo el tiempo.
